Aceite de semillas de cáñamo o aceite de oliva, ¿cuál es mejor?
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¿CBD en aceite de oliva o CBD en aceite de semilla de cáñamo?
Ni el aceite de oliva ni el de semilla de cáñamo alteran los beneficios terapéuticos del cannabidiol. En cambio, atributos como el contenido ácido, la estabilidad, el sabor y los alérgenos, son los factores que hay que tener en cuenta a la hora de decidir qué producto comprar.
Antes de determinar qué tipo de aceite de CBD es el que mejor se adapta a tus necesidades, vamos a ver lo que tienen en común. Ambos contienen CBD del mismo cáñamo europeo de calidad cultivado de forma orgánica. También utilizan la extracción de la planta completa, y conservan componentes y ácidos grasos esenciales.
El equilibrio de estos ácidos es algo fundamental para decidir qué aceite es el más apropiado. Los efectos de los ácidos grasos omega-6 (ácidos grasos saturados) y omega-3 (ácidos grasos poliinsaturados) en la dieta occidental ya han recibido una extensa cobertura en artículos anteriores. Sin embargo, si nos fijamos en las proporciones del aceite de oliva y el de semilla de cáñamo, podremos empezar a tomar una decisión objetiva.
Basándonos en la tabla anterior, vemos el total de ácidos grasos saturados (ácido linoleico y linolénico) y de ácidos grasos poliinsaturados (palmítico y esteárico). Enseguida nos damos cuenta de cómo se comparan los distintos aceites. Los dos existen en ambos extremos del espectro.
Proporción entre omega-6 y omega-3
Un desequilibrio de ácidos grasos omega-6 y omega-3 favorece la aparición de varias enfermedades crónicas. Trastornos como las afecciones cardiovasculares, el cáncer y las enfermedades inflamatorias se producen por una excesiva ingesta de ácidos grasos saturados (omega-6). Mediante la introducción de omega-3, ayudamos al cuerpo a procesar los ácidos grasos omega-6 y a restablecer un equilibrio sano y natural.
La popularidad de los alimentos precocinadas y la comida rápida ha causado un gran aumento de la cantidad de ácidos grasos omega-6 que se consumen. En algunos casos, la relación puede ser tan alta como de 15:1 a 16,7:1 (de omega-6 respecto a omega-3). Lo ideal sería un ratio de alrededor de 3:1. Acercarse a esta proporción ideal ofrece muchos beneficios biológicos.
Afortunadamente, aquí es donde el aceite de semillas de cáñamo se convierte en el producto preferido. La proporción media del cáñamo es de 3:1, mientras que la del aceite de oliva es de 15:1. ¿Significa esto que el aceite de oliva con CBD es un producto poco saludable? No si ya sigues una dieta con un equilibrio adecuado de ácidos grasos. En este caso, la repercusión del aceite de oliva sería mínima. Si, por el contrario, necesitas ayuda para restablecer la proporción ideal, es probable que el aceite de semillas de cáñamo sea el más adecuado.
Total de ácidos grasos insaturados
Si nos fijamos en la composición de los ácidos grasos de ambos aceites de manera aislada, el mejor producto dependerá, una vez más, de las opciones de tu estilo de vida. Volviendo a la tabla en la que se detalla el contenido de ácidos grasos insaturados, el aceite de cáñamo es el claro ”vencedor“. Sin embargo, dado que muchas personas optan por tomar suplementos de omega-3 a diario, es posible que los ácidos grasos insaturados adicionales no sean necesarios. Entonces, el aceite de oliva se convierte en el portador preferido.
Contenido de grasas saturadas
Utilizando el mismo concepto, se puede invertir el escenario anterior. Si sigues una dieta muy rica en omega-3, el aceite de semillas de cáñamo te aportará menos beneficios. En su lugar, el aceite de oliva te ayudará a alcanzar la proporción ideal de la que ya hemos hablado. Si, por el contrario, las obligaciones diarias o el trabajo te impiden comer de forma equilibrada, deberás elegir un producto de CBD con aceite de semillas de cáñamo como portador.
Estabilidad
Las grasas saturadas son mucho más estables que las insaturadas. Esto significa que son menos susceptibles a los cambios de temperatura y a los daños causados por la exposición a la luz. Si prefieres dejar tus productos de CBD donde puedas verlos, el aceite de oliva es la mejor opción, ya que mantendrá su integridad durante más tiempo; y al tener tu producto de CBD fácilmente disponible, es menos probable que te olvides de tomarlo. Si guardar los suplementos para la salud de forma adecuada no te supone ningún problema, elige el aceite de semillas de cáñamo.
Sabor
El sabor es un factor obvio a tener en cuenta. El aceite de semillas de cáñamo es más fuerte, y tiene un sabor a nueces. El aceite de oliva es mucho más suave y, para algunas personas, más fácil de consumir. Ambos productos utilizan el mismo CBD de calidad premium, así que elige el que mejor te sepa.
Alergias
El último factor que hay que considerar es si tienes alguna alergia. Dado que las alergias a los frutos secos/semillas son bastante habituales, deberás evitar el aceite de semillas de cáñamo. El aceite de oliva, sin embargo, procede de la aceituna, por lo que lo podrás consumirlo de forma segura si tienes alergia a algún fruto seco. Una vez más, selecciona el aceite que mejor se adapte a tus necesidades.
En general, elegir un aceite u otro no afecta a la calidad ni a las propiedades del CBD que contiene. La decisión dependerá de los gustos personales, las restricciones alérgicas y tus propias opciones alimentarias. Esperamos que la información facilitada despeje cualquier duda que tengas sobre la diferencia entre el aceite de oliva y el aceite de semilla de cáñamo, ya que ambos son una opción fantástica.