¿Será Karlien Sleper la primera atleta olímpica de Cibdol?

Karlien Sleper no es solo la primera deportista patrocinada por Cibdol, sino también la primera que participa en unos Juegos Olímpicos. Con sus miras puestas en las Olimpiadas de Invierno de 2022, es consciente de los retos que le esperan antes de llegar allí.

Trayectoria hacia la pista olímpica de Pekín

En poco más de un año, Yanqing, un condado a las afueras de Pekín, será la sede de los Juegos Olímpicos de Invierno, y la oportunidad de Karlien para alcanzar la gloria olímpica. A pesar de los obstáculos, está muy entusiasmada con las Olimpiadas: "Llevan encabezando mi lista de deseos desde 2018", comenta Sleper (27) con una sonrisa.

Pero Karlien deberá dejar sus aspiraciones olímpicas a un lado por el momento.

"Tenía planeado pasar tres semanas en Yanqing dentro de unos meses, pero el evento de pruebas se ha cancelado debido al coronavirus", explica Sleper. "El primer reconocimiento de la pista de bobsleigh no será hasta octubre".

Pero este retraso no ha hecho que se desanime. "Estoy deseando que llegue el evento. Tengo muchas ganas de conocer el circuito, experimentar cada bajada y familiarizarme con la pista".

Conocer el circuito es parte fundamental del bobsleigh, sobre todo en el caso de Pekín, cuya pista se ha construido recientemente.

"Todas las pistas de bobsleigh son distintas, y esta está sin estrenar. Por lo general, los competidores recorren la pista varias veces antes del evento, pero en estos Juegos de Invierno todos empezamos de cero. Normalmente, esto supondría una desventaja, pero cuando me enfrento a deportistas alemanas que han hecho el recorrido cien veces más que yo, todo depende de quién es capaz de aprenderse más rápido el trazado y los puntos de presión".

Velocidades de 120 kilómetros por hora

El objetivo de Sleper es convertirse en la primera estrella olímpica holandesa del monobob, lo que, en sí mismo, sería todo un logro. Este deporte no solo es una incorporación relativamente nueva a los Juegos Olímpicos de Invierno, sino que además no hay mucho entusiasmo por ver a cuatro mujeres en un trineo, y toda la atención se centra en las competiciones individuales.

Afortunadamente, para Sleper el bobsleigh no es un fenómeno nuevo, como lo es para muchas otras personas. Empezó a practicarlo en 2013.

"En un principio me dediqué al ciclismo, pero cuando un amigo me enseño un mensaje de la asociación de bobsleigh, tuve que probarlo". Al darse cuenta de que se le daba bien, Sleper probó a pilotar con otras aficionadas a ese deporte. "Mi pilotaje provocaba demasiado estrés y responsabilidad en las otras ocupantes del trineo. Me gustaba apurar al máximo en cada curva".

Puede reírse del tema tranquilamente, porque ahora hace ambas cosas. En un trineo de una sola plaza, a esta exlanzadora de jabalina no le queda otro remedio.

"La ventaja es que no hay nadie detrás de mí, por lo que puedo arriesgar más que en un trineo de dos plazas. También he aprendido a controlar los nervios, a tener confianza en el trineo, y a no virar demasiado. Y, por supuesto, también está la adrenalina de ir a 120 kilómetros por hora. Aunque a mí no me parece que vaya rápido, estoy tan concentrada en la pista, que todo parece ocurrir a cámara lenta".

Superando contratiempos

Con el ciclismo convertido en un recuerdo lejano, Sleper está ahora completamente centrada en el monobob, y su trabajo empieza a dar frutos. Hace poco se le concedió el estatus A por parte del NOC*NSF (Comité Olímpico Neerlandés *Federación Deportiva Holandesa), un reconocimiento del que está muy orgullosa. "He luchado por ello durante dos años".

Sin embargo, a pesar de este éxito, no ha sido un camino de rosas, confiesa Sleper. Podrá participar en las copas mundiales de la próxima temporada gracias a un reciente cambio en las reglas de la asociación internacional. Pero, a pesar de las dificultades, nada ha frenado su motivación y determinación.

"Creo que no es justo, pero tras reflexionar durante un tiempo, lo he aceptado. Me tomaré un descanso a finales de este año (2020), y después me espera un largo camino hasta Pekín, participando en pruebas del campeonato de Europa y entrenando con el equipo holandés".

Persiguiendo sus sueños con ayuda de Cibdol

Gracias a su persistencia y coraje, Sleper es la persona ideal para Cibdol. "Primero tuve que comprobar que el patrocinio era legal, y si el CBD estaba incluido en la lista de las autoridades antidopaje", afirma, riendo.

Sleper se pasea orgullosa apoyando a Cibdol, con el logo claramente visible en su trineo y ropa deportiva. Es una asociación que para Sleper tiene mucho sentido, ya que la gente no solo puede aprender sobre el monobob, sino también sobre el CBD.

"Cibdol es nuevo en este deporte. Me hacen muchas preguntas al respecto. La gente quiere saber qué hace Cibdol".

Sleper también aprovecha la oportunidad para contarnos sus experiencias. "Recuerdo estar muy nerviosa por la primera bajada en Winterberg el año pasado; no podía dormir. Entonces tomé Meladol de Cibdol, y me ayudó mucho. Ahora, si alguna vez me estreso, sé que está ahí. Y el bálsamo labial de Cibdol también funciona de maravilla. Me ayuda a pasar de las condiciones climáticas del verano a las de invierno con mucha facilidad".

Estamos muy orgullosos de Karlien como embajadora de Cibdol, tanto dentro como fuera de la pista. Sabemos que va a seguir arrasando en el mundo del monobob. Puedes seguir su trayectoria en Instagram, y leer más sobre esta estrella del monobob en el blog de Cibdol.

Text: Dominique Pichel