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¿Qué es el cariofileno?
El cariofileno pertenece a un grupo de compuestos del cannabis conocidos como terpenos. En concreto, esta molécula se clasifica como sesquiterpeno debido a las tres unidades de isopreno de su estructura. Es uno de los terpenos más abundantes del cannabis, por lo que muchas cepas contienen grandes cantidades de cariofileno. Es muy apreciado por proporcionar sabores y aromas únicos, pero la molécula también ofrece potencial terapéutico.
A diferencia de otros terpenos, el cariofileno desempeña el papel de un cannabinoide, al igual que el CBD. Su estructura única le permite unirse al receptor CB2 del sistema endocannabinoide. Vamos a echar un vistazo más detallado al cariofileno, sus características y su potencial medicinal.
Aroma
El cariofileno produce aromas de pimienta, especias y clavo. Como se produce en cantidades relativamente elevadas, está muy presente en el aroma característico de las flores de cáñamo y las plantas de cannabis.
También se encuentra en
El cariofileno se puede encontrar en otras partes de la naturaleza. Esta molécula es la base de los aromas terrosos tan característicos de la pimienta negra, albahaca, lúpulo, canela y orégano. Los investigadores han calificado al cariofileno como un "cannabinoide dietético[1]" debido a que se encuentra en muchas hierbas y especias culinarias. Curiosamente, el cariofileno ofrece a los consumidores la oportunidad de modular su sistema endocannabinoide a través de la ingestión de alimentos. A medida que la ciencia vaya obteniendo más información sobre esta molécula, probablemente se irá haciendo cada vez más popular.
Posibles efectos
Los investigadores han estudiado en profundidad el cariofileno. A pesar de que hay pocos ensayos clínicos, los estudios en animales han demostrado un gran potencial medicinal. El cariofileno ejerce sus efectos a través del sistema endocannabinoide, así como a través de otros mecanismos. Hasta ahora, los estudios han identificado[2] las siguientes propiedades:
• Antioxidante
• Neuroprotector
• Antimicrobiano
• Gastroprotector
• Anticonvulsivo
• Podría reducir la inflamación
• Podría reducir el dolor
• Podría ayudar a tratar el alcoholismo
Investigación de apoyo
Aunque estos efectos son alentadores, todavía no se han confirmado en el ser humano. Sin embargo, los estudios realizados en células y animales nos dan una idea de cómo el cariofileno podría ser beneficioso para las personas.
El cariofileno podría ser la clave para futuros tratamientos para la ansiedad y la depresión. Hasta ahora, parece ser efectivo en roedores. Un estudio en animales[3] publicado en la revista Physiology & Behavior descubrió que el cariofileno produce cambios de comportamiento relevantes sobre la ansiedad y la depresión en ratones. Los roedores fueron sometidos a una gran cantidad de pruebas destinadas a medir el estrés mental, la ansiedad y la depresión.
Los investigadores descubrieron que la administración de cariofileno redujo los niveles de ansiedad, depresión y comportamientos compulsivos. Los autores del artículo atribuyen estos efectos a la capacidad del terpeno para unirse al receptor CB2, un punto implicado en la ansiedad y la depresión. Estos hallazgos se confirmaron cuando los investigadores dieron a los ratones una sustancia que bloquea los receptores CB2. Cuando se bloquearon esos puntos, el cariofileno dejó de producir los mismos efectos.
Curiosamente, el cariofileno podría ayudar a romper el ciclo de la adicción al alcohol, un trastorno originado parcialmente en el sistema de recompensa de la dopamina. Una investigación[4] publicada en la revista Pharmacology Biochemistry and Behavior afirma que los receptores CB2 del cerebro podrían desempeñar un papel en la recompensa del alcohol.
En su estudio, los investigadores decidieron probar los efectos del cariofileno en el consumo de alcohol en ratones ebrios. Permitieron que los roedores bebieran de dos botellas, una llena de alcohol y la otra de agua. Los investigadores cada día llenaban la botella con un tipo de alcohol más fuerte. Después de recibir inyecciones de cariofileno, los ratones redujeron su consumo de alcohol de forma voluntaria. Es más, decidieron volver a hacerlo después de que los investigadores les administrasen bloqueadores de los receptores CB2. Los investigadores afirman que el receptor CB2 parece participar en la dependencia del alcohol y podría ser un objetivo futuro para el tratamiento del alcoholismo.
El cariofileno, y su afinidad por nuestro querido receptor CB2, también podría ayudar a reducir la inflamación y el dolor neuropático. Hay varios estudios que sugieren que el receptor CB2 interviene en la modulación de ambos estados. Un estudio de 2014[5] publicado en la revista European Neuropsychopharmacology realizó pruebas con el cariofileno en ratones para observar sus posibles efectos antiinflamatorios y analgésicos. Los investigadores descubrieron que este cannabinoide dietético fue capaz de reducir la última fase de la inflamación debido a su acción sobre el receptor CB2.
Sin embargo, el cariofileno no mostró ningún efecto sobre la primera fase de la inflamación. En cuanto al dolor neuropático, el cariofileno fue capaz de reducir el calor provocado por la temperatura y la neuroinflamación espinal. Los investigadores concluyeron que los resultados sugieren que los factores dietéticos podrían jugar un papel importante en la modulación de estos síntomas.
El cariofileno también parece reducir las convulsiones. Un estudio[6] en Epilepsy & Behavior muestra cómo una dosis "anticonvulsiva" de cariofileno fue capaz de reducir la intensidad de las convulsiones en ratones. Los investigadores sugieren que el terpeno debería estudiarse más a fondo de cara al desarrollo de fármacos anticonvulsivos.
[1] Gertsch, J., Leonti, M., & Raduner, S. (2008). Beta-caryophyllene is a dietary cannabinoid. NCBI. https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC2449371/ [Referencia]
[2] Russo, E. B., & Marcu, J. (2017). Cannabis Pharmacology: The Usual Suspects and a Few Promising Leads. Cannabinoid Pharmacology, 67–134. https://doi.org/10.1016/bs.apha.2017.03.004 [Referencia]
[3] Bahi, A., al Mansouri, S., al Memari, E., al Ameri, M., Nurulain, S. M., & Ojha, S. (2014). β-Caryophyllene, a CB2 receptor agonist produces multiple behavioral changes relevant to anxiety and depression in mice. Physiology & Behavior, 135, 119–124. https://doi.org/10.1016/j.physbeh.2014.06.003 [Referencia]
[4] al Mansouri, S., Ojha, S., al Maamari, E., al Ameri, M., Nurulain, S. M., & Bahi, A. (2014). The cannabinoid receptor 2 agonist, β-caryophyllene, reduced voluntary alcohol intake and attenuated ethanol-induced place preference and sensitivity in mice. Pharmacology Biochemistry and Behavior, 124, 260–268. https://doi.org/10.1016/j.pbb.2014.06.025 [Referencia]
[5] Klauke, A. L., Racz, I., Pradier, B., Markert, A., Zimmer, A., Gertsch, J., & Zimmer, A. (2014). The cannabinoid CB2 receptor-selective phytocannabinoid beta-caryophyllene exerts analgesic effects in mouse models of inflammatory and neuropathic pain. European Neuropsychopharmacology, 24(4), 608–620. https://doi.org/10.1016/j.euroneuro.2013.10.008 [Referencia]
[6] Oliveira, C. C. D., Oliveira, C. V. D., Grigoletto, J., Ribeiro, L. R., Funck, V. R., Grauncke, A. C. B., Souza, T. L. D., Souto, N. S., Furian, A. F., Menezes, I. R. A., & Oliveira, M. S. (2016). Anticonvulsant activity of β-caryophyllene against pentylenetetrazol-induced seizures. Epilepsy & Behavior, 56, 26–31. https://doi.org/10.1016/j.yebeh.2015.12.040 [Referencia]
[1] Gertsch, J., Leonti, M., & Raduner, S. (2008). Beta-caryophyllene is a dietary cannabinoid. NCBI. https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC2449371/ [Referencia]
[2] Russo, E. B., & Marcu, J. (2017). Cannabis Pharmacology: The Usual Suspects and a Few Promising Leads. Cannabinoid Pharmacology, 67–134. https://doi.org/10.1016/bs.apha.2017.03.004 [Referencia]
[3] Bahi, A., al Mansouri, S., al Memari, E., al Ameri, M., Nurulain, S. M., & Ojha, S. (2014). β-Caryophyllene, a CB2 receptor agonist produces multiple behavioral changes relevant to anxiety and depression in mice. Physiology & Behavior, 135, 119–124. https://doi.org/10.1016/j.physbeh.2014.06.003 [Referencia]
[4] al Mansouri, S., Ojha, S., al Maamari, E., al Ameri, M., Nurulain, S. M., & Bahi, A. (2014). The cannabinoid receptor 2 agonist, β-caryophyllene, reduced voluntary alcohol intake and attenuated ethanol-induced place preference and sensitivity in mice. Pharmacology Biochemistry and Behavior, 124, 260–268. https://doi.org/10.1016/j.pbb.2014.06.025 [Referencia]
[5] Klauke, A. L., Racz, I., Pradier, B., Markert, A., Zimmer, A., Gertsch, J., & Zimmer, A. (2014). The cannabinoid CB2 receptor-selective phytocannabinoid beta-caryophyllene exerts analgesic effects in mouse models of inflammatory and neuropathic pain. European Neuropsychopharmacology, 24(4), 608–620. https://doi.org/10.1016/j.euroneuro.2013.10.008 [Referencia]
[6] Oliveira, C. C. D., Oliveira, C. V. D., Grigoletto, J., Ribeiro, L. R., Funck, V. R., Grauncke, A. C. B., Souza, T. L. D., Souto, N. S., Furian, A. F., Menezes, I. R. A., & Oliveira, M. S. (2016). Anticonvulsant activity of β-caryophyllene against pentylenetetrazol-induced seizures. Epilepsy & Behavior, 56, 26–31. https://doi.org/10.1016/j.yebeh.2015.12.040 [Referencia]
